
Por Alberto Paz:
El día Martes a las 23:00 en cancha de Alianza, Gloria Sanjuanina enfrentaba al caucetero Justo P. Castro, tratando de confirmar la levantada, tanto futbolística como anímica evidenciada por los muchachos dirigidos por el trío Paz - Paz - Caballero. Su rival contaba con el empujón que le dió su victoria en el partido anterior y querían bajar a los muchachos gloriosos. Un desperfecto en la iluminación de la cancha hizo peligrar el comienzo del cotejo, pero fue resuelto a medias y de común acuerdo entre delegados y jugadores, el match dio comienzo casi con una hora de atraso, con la novedad que el tiempo no sería cronometrado, sino se jugaría dos tiempo de 20 minutos de corrido, así cualquier error ó desatención podía costar caro.-
La Gloria arrancó con Martín en el arco, Baigorrí de cierre, Heras como ala derecha y reconfirmando su levantada, como ala izquierdo ingresaba Gabriel Díaz y como poste y referente de ataque lo hacía Rezinovski. Comienzo impreciso de La Gloria, equivocando los caminos de ataque y mostrando un nerviosismo desacostumbrado, que traía como consecuencia constantes contragolpes y de uno de ellos llegó la apertura del marcador, tras un buen movimiento en ataque que dejó solo al delantero caucetero que sometió a Martín que nada pudo hacer. Caras con desconcierto en los jugadores y en los hinchas que fueron a apoyar, pero desde el banco sólo partían órdenes de aliento y pedido de tranquilidad, confiando en lo que puede hacer este equipo. Luego de una buena rotación de balón y jugadores, la redonda le quedó a Heras en la puerta del área y con un fortísimo remate conquistó el empate y trajo tranquilidad a todos.
Transcurrieron un par de minutos donde quedó reflejado que La Gloria era más, que lastimaría en cualquier momento, y esa diferencia llegó a través de una exquisita definición del "Negro" Díaz quién frente al arco (que para muchos, es muy chico) definió como los dioses, junto al palo y festejo glorioso acompañado del pasito de baile del goleador que hizo delirar a propios y extraños. Gol que trajo tranquilidad y sacó a relucir lo mejor de nuestros muchachos, que ya con Peláez en cancha y vistiéndose este de goleador, pudo estirar la diferencia y terminar así el primer tiempo.
Luego de una charla donde privó el pedido de tranquilidad, comenzó la segunda mitad y con el vinieron los cambios, adentro Lucero (que cumplió de nuevo a la perfección lo pedido) que se asoció perfectamente con Peláez, adentro Ocampo que en su función defensiva cumplió pero donde más se hizo notar fue con sus llegadas en ataque concluídas con remates que hicieron lucir al arquero caucetero, adentro Díaz Romitti por Martín, demostrando Maximiliano que pasa un buen momento y que está listo para saltar a la cancha cuando se lo necesite. Así siguió el cotejo y con el vino una catarata de goles que terminaron por dejar el score en 7 para La Gloria 1 para Justo P. Castro. Victoria Gloriosa, otra vez necesaria, confirmando que el triunfo semana anterior no fue casualidad, que este equipo quiere llegar, tiene con que y si sigue por esta senda no se le puede escapar.
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